MALOUMA, la cantante, músico y mujer más querida y respetada de Mauritania

18.08.2015 19:41

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música actual y contemporánea | cultura | involución

Amigas y amigos lectores, antes de seguir leyendo os recomiendo que para entrar en ambiente hagáis sonarDunya, por ejemplo.

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Malouma Mint Moktar Ould Meidah* nació en 1960 en Mederdra, Trarza, Mauritania en el seno de una familia bereber de griots (bardos).

Malouma ya desde los 10 años se mostró combativa ante la injusticia y los abusos de autoridad.

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Con un reconocido músico tradicional y poeta como padre y un famoso intérprete de tidinit o tihardint como abuelo, Malouma creció en un ambiente musical y desde temprana edad aprendió a tocar el ardin (arpa tradicional de 10 a 12 cuerdas que suelen tocar sólo las mujeres), a cantar y a componer.

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Desde muy joven Malouma, consciente del extraordinario poder de comunicación de la música, ha cantado por los derechos e igualdad de las mujeres, lo que no le ha acarreado muchas simpatías en este conservador país musulmán.

Mauritania es el puente geográfico y musical entre el norte y el oeste de África. En este escenario rigurosamente tradicional, hay tres diferentes tipos de música: Al-bayda, la música blanca que produce refinados y delicados sonidos en sintonía con la música del norte de África; Al-kahla, la música negra más ligada a las raíces y sonidos subsaharianos y L-’gnaydya, el modo mixto que combina las dos anteriores. Malouma fue pionera en fusionar l’gnaydya con el blues. Antes de ella, nadie se había atrevido a utilizar el tidinit y el ardin junto a la guitarra y otros instrumentos más modernos.

A los 16 años se hizo famosa con una canción aparentemente azucarada titulada “Habibi habeytou” que viene a significar algo como “Amo amar a mi amor”, pero que en realidad es un alegato contra la extendida práctica del matrimonio con niñas en su país.

Precisamente a causa de su matrimonio —presión social, sometimiento a las tradiciones e hijos— su carrera quedó interrumpida durante unos años.

A mediados de los ochenta volvió con renovada fuerza con letras que, entre otras cosas, llaman a luchar contra el sida y la ignorancia o a vacunar a los niños.

La “Diva Ribelle” o “la cantante del pueblo” como también es conocida, verdadera introductora de la música moderna en Mauritania, pronto se convirtió en un ícono para las mujeres, los jóvenes y los progresistas de Mauritania primero y de todo el mundo árabe después.

Su apoyo a la integración de las comunidades árabes y afromauritanas le valío la enemistad del régimen del Presidente Maaouya Ould Sid'Ahmed Taya. Sus canciones fueron prohibidas en la radio y la televisión, sus anuncios para UNICEF censurados, pero estas y otras acciones intimidatorias del régimen, no lograron vencer su determinación y resistencia.

Malouma grabó tres álbumes fuera de Mauritania: El jardín del Edén (1998), Dunya (2002) y Nour (2007) que tuvieron un moderado éxito, llevándola a realizar actuaciones en Europa y América, como por ejemplo el concierto que ofreció en el verano de 2004, acompañada por la Sahel Hawl Blues —un grupo de 9 jóvenes músicos— en el prestigioso Festival Internacional de las Culturas de Pirineos Sur.

En Mauritania, siguió prohibida hasta que, en agosto de 2005, un golpe militar depuso a Ould Taya.

En el año 2007 Mauritania tuvo las primeras elecciones realmente libres desde su independencia en 1960. Sidi Abdallahi se convirtió en presidente y Malouma en senadora.

Tan popular era y es la cantante, que en las manifestaciones de protesta que siguieron al golpe de estado del general Uld Abdelaziz al año siguiente, en las que Malouma participó, la consigna de las fuerzas represoras era “Malouma no se toca”.

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Malouma —divorciada con cuatro hijos—, nunca ha aceptado el resultado de las elecciones del 18 de julio de 2009, que ganó el mencionado general, alegando falta de libertad y fraude. Supongo que esta puede ser la causa de su desaparición virtual, en todo caso yo no he sido capaz de detectar ninguna noticia posterior a ese año, sobre esta extraordinaria músico, cantante, compositora, activista y bravísima mujer.